Este patio se encuentra situado en la calle Santa Úrsula, 7
Desaparecida sin pena ni gloria la unificación artificial entre esta calle y su continuación topográfica por el Corralillo de San Bartolomé, dispuesta por el Callejero oficial, termina hoy la de Santa Úrsula en la esquina con la bajada de San Bartolomé, pequeña plazuela que pudo ser un cementerio de la parroquia que en ella tiene su entrada. Comienza la calle al pie de la torre de El Salvador, que pertenece a la iglesia más antigua de Toledo, la más repleta de relieves visigodos y que, por esta cara ostenta, además, dos fragmentos de friso romanos, dentados ambos, más un tercero en la esquina de la nave de la Epístola, junto al suelo. Desde la plazuela (que se llamaba “de la Casa del Moro” por entonces), sigue la calle descendiendo por ser la vaguada central del barrio, con función similar a la calle del Barco, aunque su área pluvial es mucho menor que la de aquella. (Fuente: Historia de las Calles de Toledo)
En el núm. 7 contemplamos fachada de ladrillo y mampostería con la técnica del encintado, representa unos de los escasos ejemplos de arquitectura civil enteramente barroca de la ciudad de Toledo. Conserva los vanos originales con las carpinterías y cerramientos de hierro, excepto el balcón en planta segunda. En piso primero con dos huecos grandes enrejados y en medio otro con un mirador de madera, de instalación reciente. Remata el edificio siete arcos con columnas toscanas, con balcones. En la reja del balcón sobre la puerta, a modo de escudo roleos que sostienen un redondel con enseña.
Portada en piedra con columnas y dintel, decorado con triglifos y metopas con dibujos de estrellas. Con respecto a la evolución del espacio interior construido, las trazas de diferentes reformas presentan en la actualidad un aspecto totalmente barroco. Los elementos más representativos son el patio, la escalera, así como dos sótanos que recorren parte del edificio.
Patio de grandes proporciones, al que accedemos por peldaños de piedra de granito, sobrio en cuanto a ornamentación, aunque bien ordenado; solado con cantos rodados. La escalera, elemento fundamental de conexión entre plantas con balaustradas de hierro forjado. Una de las fachadas del patio se encuentra decorada en primera planta con arcos fingidos en estuco. Dichos arcos están situados frente al zaguán para crear un primer impacto desde su acceso a la entrada desde la calle. (Fuente: La Ciudad Medieval de Toledo – Jean Passini y Ricardo Izquierdo Benito)